Las habilidades para la vida son lecciones valiosas que los niños usarán a lo largo de su vida. Pero la mayoría de los niños no aprenden a manejar situaciones del mundo real hasta que están en la escuela secundaria. No espere hasta que sus hijos sean adolescentes para enseñarles habilidades para la vida. Empiece enseñando lecciones prácticas a sus hijos en este momento, comenzando con la toma de decisiones y luego aprovechando cada lección de habilidades de la vida a medida que crecen sus hijos.
Habilidades para la toma de decisiones
Tomar buenas decisiones es una habilidad para la vida que todo niño debe comenzar a aprender a una edad temprana. Comience con decisiones básicas como decidir helado de chocolate o vainilla, calcetines azules o calcetines blancos, jugar trenes o jugar autos. Cuando los niños alcanzan la edad de la escuela primaria, pueden comenzar a aprender sobre las recompensas de las buenas decisiones y las consecuencias de las malas decisiones. Ayúdelos a sopesar sus opciones, evalúe los pros y los contras de esa decisión y luego déjelos tomar la decisión final para que vean cómo funcionan las cosas.
Salud e higiene
En nuestro agitado día a día, siempre les estamos diciendo a nuestros hijos que se bañen, se cepillen los dientes, se laven las manos y se cambien la ropa interior. Sin embargo, nunca les decimos el por qué. Explique por qué la salud y la higiene siempre serán partes cruciales de sus días.
A medida que sus hijos comiencen a aprender sobre esta habilidad para la vida, establezca un cuadro que les permita marcar cada tarea a medida que la completan. Cuando estos hábitos saludables ya se establecieron a lo largo del tiempo, retire la tabla y sus hijos revisarán mentalmente la lista a lo largo del día sin tener que recordarles continuamente.
Gestión del tiempo
Todos los padres saben lo importante que es la gestión del tiempo para mantener a su familia al día. Pero también es importante que los niños comiencen a aprender lecciones de gestión del tiempo ahora.
No solo enseñe a los niños más pequeños a medir el tiempo, a concentrarse en las tareas o a cumplir un horario, sino también a ayudarles a hacer más fáciles sus días. Aprender esta habilidad vital también los ayudará a convertirse en maestros del tiempo.
Preparación de comida
Los más pequeños pueden aprender a preparar una comida en la cocina. No estamos hablando de un almuerzo completo, por supuesto, pero puedes enseñarles cómo preparar un emparedado, el cómo usar el microondas. Desde pequeños hasta adolescentes, sus hijos pueden ser sus únicos chefs cuando llega el momento de cocinar.
A medida que sus hijos adquieren más confianza en la cocina, pueden desarrollar otras habilidades para la preparación de comidas, como aprender a empacar su propio almuerzo, hacer opciones de alimentos saludables, cocinar una comida sencilla en la cocina con la supervisión de un adulto y planificar sus propias comidas.
Administración del dinero
Enseñamos a nuestros hijos a contar. Enseñamos a nuestros niños matemáticas básicas. Podemos llevar esas lecciones más allá y convertirlas en habilidades para la vida que pueden comenzar a usar en ese momento.
La administración del dinero es algo con lo que los adultos tienen problemas. Ahora es el momento perfecto para comenzar a enseñarles a sus hijos sobre el dinero, su importancia y cómo manejarlo para que estén mejor preparados cuando comienzan a ganar un sueldo propio. Enséñeles a sus hijos a administrar eficazmente el dinero para que puedan aprender a ahorrar, gastar sabiamente, hacer cambios e incluso comprender que escribir un cheque o usar una tarjeta de crédito no es dinero gratis.
Limpieza
A veces es más fácil para los padres hacer todo el mantenimiento por cuenta propia. Es una oportunidad perdida para enseñarles a nuestros hijos cómo mantener la casa limpia, que en el futuro necesitarán saber; cuando se vayan a la universidad y cuando algún día tengan una casa propia de la cual ocuparse.
Comience elaborando tablas de tareas apropiadas para cada edad que incluyen aprender cómo hacer la cama, vaciar el lavavajillas y quitar el polvo. Además, piense en lo que ensucian diariamente sus hijos y en cómo pueden limpiarlos después ellos mismos. Por ejemplo, mantenga una toalla o una esponja en el baño que les permita a los niños quitarse los pedacitos de pasta de dientes que dejan en el mostrador. Dado que los juguetes se mueven mágicamente de habitación en habitación en su casa, mantenga una canasta donde los niños puedan colocarlos para llevarlos a su dormitorio al final del día. Establezca un horario de limpieza diario para hacer de la limpieza una parte de su rutina y atenerse a ella.
Lavandería
Si tienes hijos, tienes mucha ropa. Enseñar a sus hijos a lavar, doblar y guardar la ropa es una habilidad para la vida que los ayudará.
Los niños pequeños pueden aprender mucho ayudándote con la lavandería, como clasificar la ropa por color y entender las texturas. A medida que crecen, los niños pueden comenzar a poner la ropa en la lavadora y transferirla a la secadora. Los niños de primaria pueden aprender cómo operar la lavadora y la secadora, y cuánto de detergente se necesita para la ropa. A medida que la ropa sale de la secadora, puede mostrarles cómo doblar su ropa y guardarla. Muy pronto, manejarán toda la ropa por su cuenta.
Comparación de compras
Cuando somos adultos entendemos el valor del dinero y la importancia de la comparación de precios. Sin embargo, a menudo pasamos por alto esta valiosa habilidad para la vida que deberíamos enseñar a nuestros hijos.
Muestre a sus hijos cuánto cuesta un determinado artículo en varias tiendas, comparar la calidad, costo y beneficio. Enseñarles a los niños a ser compradores inteligentes y tomarse el tiempo para realizar comparaciones en las compras les ayudará a ahorrar dinero dondequiera que vayan, al mismo tiempo que tomará decisiones inteligentes sobre los tipos de productos que elijan.
Prepararse para el día siguiente
Los niños pueden aprender cómo prepararse por sí mismos a una edad temprana. Permita que elijan la ropa que usarán al día siguiente antes de irse a la cama. Elija un despertador que sea fácil de configurar. Aliste su peine y cepillo de dientes. Use imágenes para ilustrar todo el proceso.
Por ejemplo, tome una foto del despertador, su ropa, cepillo de dientes y peine para recordarles. Las imágenes son tarjetas diarias hasta que adquieran el hábito de prepararse por su cuenta.
Mantenimiento de la casa
A los niños les encanta ayudar y siempre hay tareas ligeras de mantenimiento en la casa que pueden aportar. Las tareas fáciles incluyen mostrarles cómo cambiar el rollo de papel higiénico o guardar la basura. Los niños mayores pueden aprender cómo cambiar una bombilla, desatascar un drenaje y cambiar la bolsa de la aspiradora.
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